Íñigo Onieva habla y da su versión sobre su despido

Íñigo Onieva habla y da su versión sobre su despido.

Según Íñigo se queda sin tabajo porque asegura que no consiguió llegar a un acuerdo y se ha resuelto el contrato “de forma amistosa”.

Íñigo Onieva vuelve a ocupar titulares en la prensa española, aunque esta vez nada tiene que ver con su boda y su historia de amor con Tamara Falcó. El empresario, que pasará por el altar a principios del próximo mes de julio junto a la hija de Isabel Preysler, se ha quedado sin el trabajo que venía haciendo en los madrileños restaurantes Tatel y Totó como relaciones públicas. En las últimas horas se ha hablado mucho sobre el tema y hay detrás una gran especulación, por eso desde Semana se han puesto en contacto con una persona de su entorno que ha explicado la versión oficial que aporta Onieva.

“La situación real es que, después de dos años en el grupo, su proyección era muy limitada. En las últimas semanas le propusieron que desempeñara un cambio de funciones sin tocar los términos económicos”, asegura la fuente. Íñigo se habría negado a obedecer a esta decisión y habría llegado a un acuerdo resolviendo “el contrato de forma amistosa y sin ningún problema”.

La aclaración llega unas horas después de que Belén Esteban se pronunciara sobre el tema en Sálvame con una versión totalmente diferente: “A Íñigo Onieva le han despedido del restaurante y de la discoteca de las que era relaciones públicas. Le han dicho que no vuelva a Tatel y Totó, donde ejercía como relaciones públicas. No sé qué habrá pasado, pero me han dicho que ya no trabaja ahí”, explicó la colaboradora.

Íñigo ha disfrutado de unos días en Lourdes coincidiendo con el fugaz viaje que ha realizado Tamara a Nueva York para buscar un nuevo diseño de su vestido de novia. Y es que las malas noticias nunca llegan solas y después de que Falcó se quedara sin vestido, Onieva se ha quedado sin trabajo. Quedan todavía varias semanas para que se celebre el enlace y muchas complicaciones con las que lidiar, quizá por eso el empresario haya optado por coger fuerzas en el santuario francés. Eso sí, Íñigo tiene muchos planes en el horizonte, entre ellos un proyecto personal de restauración que “se inaugurará a principios de 2024″.